Los milagros de Thibaut Courtois en el Madrid tienen su continuación con Bélgica y por ello el guardameta ha viajado a Qatar acompañado de uno de sus fisios de confianza en el conjunto blanco, Davide Violati. La relación entre ambos es estrechísima y Courtois lo considera una de las piezas clave para haber alcanzado el mejor nivel de su carrera desde que llegó al Bernabéu.

La relevancia de Violati para Courtois en el Madrid ha ido subiendo tanto que ha decidido llevárselo también a Qatar junto a él. No suele ser lo habitual ni está especialmente bien visto por las federaciones que alguien que está empleado en un club haga el trabajo de otros que sí son sus empleados en este tipo de torneos, pero muy pocos, quizá nadie, conocen la máquina perfecta que en estos momentos es Courtois. Además, con el peso adquirido por el madridista en la selección (es una de las estrellas y ya fue mejor portero en el Mundial de 2018), la federación ve con buenos ojos cualquier decisión que él pueda tomar.

Violati lleva casi tres años en el Madrid como fisioterapeuta del primer equipo y tiene unas manos privilegiadas que han hecho un gran trabajo en la recuperación de jugadores lesionados o sobrecargados. Además, es muy querido por el vestuario por su alegría y su carácter motivacional.

Al igual que Courtois, también Kevin de Bruyne, otro de los pesos pesados belgas, ha viajado a Qatar con alguien de su confianza alrededor. En este caso se trata de Kenneth Staelens, el mejor amigo del jugador del Manchester City, que se hará cargo de las redes sociales para la Asociación Belga de Fútbol. Tanto él como Davide Violati montaron en el avión rumbo a Qatar como dos miembros más de la expedición comandada por el seleccionador Roberto Martínez.

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