La última vez que la peña La Flor de Entrevías había podido celebrarse no rodeaban las paredes de La Cepa sino las del Metropolitano. Era 2019, cumplía 50 años apadrinada por el presidente Enrique Cerezo y Perea. Poco después se detuvo el mundo. Una de las peñas rojiblancas más antiguas del equipo rojiblanco regresaba este domingo a su lugar de siempre, este restaurante en Santa Eugenia, para celebrar en una comida tres años que no, los tres de pandemia, con Juan José Rubio a la mesa en cabeza, al lado de Luis Fernando Borreguero, un presidente que cuando agarró el micrófono para hablar sonó muy claro: “Yo soy del mejor equipo del mundo, no sé vosotros”. Ese cuyo escudo y banderas llenaba las paredes de rojiblanco. El Atleti. Aquel que llena su cabeza enciclopédica, con partidos, momentos de todas las épocas que entre plato y plato fue recordándole a Rubio, los 80 en la lengua.

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Entre cánticos de “Atleti, Atleti”, Rubio mandó ese mensaje de unión en un momento difícil, el del equipo antes de este parón por el Mundial de Qatar, eliminado de Europa en noviembre. “Estoy muy contento de estar aquí. El club nos está involucrando a los veteranos para que estemos con vosotros y yo os pido que os involucréis con el equipo ahora más que nunca”, pidió. “Esta mala racha pasará”, prometió. Siempre lo hacen. La historia del Atleti está llena de subir y bajar a las nubes, como canta Sabina. Luis Fernando, a su lado, asiente con la emoción que trae del hospital aún en su traje negro, a lo Cholo. Porque entre los 83 comensales en La Cepa le faltan dos. Uno su madre, Julia, Juli; otro, el hombre del que recogió el testigo de la presidencia de la peña, su padre, Fernando, los dos ingresados. “Es tu día”, le dijo el último como despedida por la mañana, ante ese frío y calor que sentía por acudir a La Cepa sin ellos, toda una vida de Atleti a su lado, de la Flor de Entrevías.

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Unidad y confianza en el Atleti que vendrá tras Qatar, ese fue el comentario a los postres, mesa a mesa. Con los amigos de siempre, la peña Eusebio Frente Madrileño, Pueblo Nuevo, Rivas, San Isidro de Alcalá de Henares, Vicálvaro, Villa Vallecas, Platense y uno nuevo, la peña Luis Aragonés. En este encuentro en La Cepa que se regresar a la normalidad. Tres años después de aquella cena con Cerezo y con Perea. Otra Liga en el Museo. Mucha emoción. Se lo contará Luis Fernando a su padre y su madre cuando se pase por el hospital antes de dirigirse al bar Dos Ángeles, sede, este domingo llena, como cuando el Atleti juega sus partidos fuera. Y las palabras de Rubio en la cabeza.