Con motivo de su 50 cumpleaños, Zinedine Zidane reconoció en una entrevista concedida al diario L’Équipe que su sueño es entrenar a la selección francesa. De hecho, el técnico marsellés rechazó al PSG porque quiere coger las riendas de la campeona del mundo una vez de por finalizado el Mundial de Qatar. Sin embargo, dicho sueño podría esfumarse, ya que Noël Le Graet, presidente de la Federación Francesa de Fútbol, ha asegurado en una entrevista a Europe 1 que podría mantener a Deschamps al frente de Francia en caso de que acabe ganando el próximo Mundial.
“Después del Mundial, ¿quién sabe si seguirá Deschamps?, si ganamos el Mundial, ¿por qué queréis que haya cambios? Si hacemos una mala Copa del Mundo, habrá muchos cambios”, subrayó Le Graet al ser preguntado por la continuidad de Deschamps. El actual seleccionador, que acaba contrato tras la cita mundialista en Qatar, todavía no ha dado pistas sobre su futuro, aunque todo apunta a que dejará el banquillo una vez finalice el Mundial.
En caso de que salga Deschamps, Zidane es el máximo favorito para sucederle en el banquillo. El exentrenador del Real Madrid confesó en la entrevista a L’Équipe que su sueño es entrenar a la selección francesa: “Tengo ganas de entrenar a la selección, por supuesto. ¿Cuándo? No depende de mí. Mi deseo es completar el círculo con la selección francesa. Conocí el equipo como jugador y es una de las cosas más bonitas que me han pasado. Es el súmmum. Y como he vivido esas emociones como jugador y ahora soy entrenador, la selección se ha quedado anclada en mi cabeza”.
Gales y Ucrania se disputan esta tarde el último billete europeo para Catar. El ganador accederá directamente al Grupo B del Mundial, donde ya esperan Inglaterra, Irán y Estados Unidos. El encuentro decisivo de la repesca se ha retrasado hasta el final de la temporada por la invasión rusa de Ucrania, que impidió que se jugara en el mes de marzo.
El Cardiff City Stadium decidirá cuál de las dos selecciones acudirá a la Copa del Mundo. Quizás los británicos sean favoritos por actuar como locales y por contar con un futbolista de la talla de Gareth Bale. El exmadridista está ante la oportunidad de devolver a su país a un Mundial 64 años después (Suecia 1958). Además, se juega su futuro porque, en caso de no clasificarse, podría incluso retirarse en los próximos meses. Pero Bale no es el único argumento galés. Allen, Rodon, Hennessey, Moore, Davis o Ramsey también quieren ir a Catar.
Los ucranianos ganaron 3-1 a Escocia el miércoles y llegan con optimismo y con la ilusión de brindar una alegría a su sufridora afición. Supondría un rayo de luz y esperanza en medio de la desolación y la barbarie de una guerra inexplicable. El combinado dirigido por Oleksandr Petrakov se encomienda a sus estrellas. Los Zinchenko, Malinovskyi, Mykolenko, Yaremchuk y, especialmente, Yarmolenko deben tirar del carro para llevar a su selección a una nueva Copa del Mundo.
Habrá representación española en Cardiff. Mateu Lahoz, el árbitro que representará a España en Catar, arbitrará este trascendental partido. Gales y Ucrania se suben al último tren que parte de Europa para ir al Mundial.
Christopher Nkunku (24 años), una de las grandes sensaciones de la temporada, seguirá vistiendo los colores del Red Bull Leipzig hasta 2026. El atacante francés acababa contrato en 2024, pero ha aceptado prolongar su vínculo con el conjunto alemán por dos temporadas. Su agente, el israelí Pini Zahavi, se reunió el pasado miércoles con la directiva del conjunto germano para cerrar la operación. Así, Nkunku seguirá en el Leipzig dos campañas más de lo que fijaba su contrato, fijando una cláusula de rescisión de contrato de 60 millones de euros.
El francés ha sido uno de los jugadores estrella de la pasada Bundesliga: ha marcado 35 goles en 50 partidos, entre todas las competiciones, logrando 20 en la Liga alemana. Sólo Lewandowski (35) y Schick (24) anotaron más que él. Eso, más la espantada de Mbappé a última hora le hicieron ser uno de los posibles objetivos del Madrid para reforzar la plantilla en este mercado de fichajes de la campaña 2022-23. Es más, varios consejeros madridistas se lo recomendaron a Florentino Pérez, pero finalmente no se produjo su fichaje. Principalmente, por la postura del conjunto alemán. Con la vista puesta en el Mundial de Qatar, donde se espera que Nkunku pueda ser uno de los jugadores revelación del torneo, la idea del equipo teutón era ofrecerle una renovación/ampliación corta (dos años más, como así ha sido) ajustando su salario a esta nueva prolongación y con vistas a la evolución del mercado de fichajes. Una buena actuación suya en Qatar le abriría las puertas a equipos como el propio Real Madrid, de la Premier (Manchester United y Chelsea), así como el propio PSG, equipo del que salió en 2019 rumbo a la escuadra alemana. Y el plan ha funcionado: Nkunku seguirá atado al Leipzig esta campaña en donde se tiene puestas muchas esperanzas en el joven francés.
El modus operandi del Leipzig ha sido el que suele llevar a cabo habitualmente para con sus jugadores: para fijar una cláusula de rescisión de contrato renuevan al jugador. De esa manera, y explicado de manera cruda, le ponen un precio al jugador. La cláusula de Nkunku es, a partir de ahora, de 60 millones de euros. Una cantidad asumible para los grandes equipos europeos. Visto desde otro punto de vista, ahora los grandes clubes europeos que quieran ficharle ya saben un precio de salida para poder hacer la operación.
El RB Leipzig completó la transferencia en verano de 2019 de este joven francés, entonces con 21 años de edad, que llegaba como uno de los mejores talentos del país galo. Ahora, y tras tres campañas de permanente evolución, Nkunku seguirá vistiendo los colores del equipo que pertenece al imperio de bebidas energéticas por el momento. Su precio ya es de 60 millones de euros…
LaLiga 2022/23 ya empieza a vislumbrarse en el horizonte. El Real Madrid es el vigente campeón de la Primera División. Esta temporada será bastante peculiar, ya que, el campeonato contará con un parón de más de un mes y medio debido al Mundial de Qatar (21 de noviembre – 18 de diciembre).
La primera jornada de LaLiga comenzará el fin de semana del 12-14 de agosto y terminará el 4 de junio de 2023. Por su parte, LaLiga SmartBank arrancará el 14 de agosto y acabará el 28 de mayo, celebrándose el playoff de ascenso entre el 4 y el 18 de junio. Esta temporada contará con un parón entre el 9 de noviembre y el 29 de diciembre debido al Mundial de Qatar 2022.
Otra de las fechas claves en el calendario es la Supercopa de España que se jugará entre el 11 y 15 de enero en Arabia Saudí. En dicha competición estarán presentes el Real Madrid, Real Betis, FC Barcelona y Valencia CF. Por su parte, la final de la Copa del Rey se celebrará el sábado 29 de abril.
La competición contará con tres parones de selecciones en la temporada 22/23. El primero será en septiembre (del 19 al 27) para jugar las dos últimas jornadas de la fase de grupos de la Liga de Naciones. El segundo será por la celebración del Mundial. El último parón será del 20 al 28 de marzo. La primera jornada de la Champions se celebrará entre el 6-7 de septiembre y la gran final será el 10 de junio.
Sorteo calendario LaLiga 2022/23: horario
El sorteo de la temporada 2022/23 tendrá lugar el jueves 23 de junio en el Salón Luis Aragonés de la Ciudad del Fútbol, en Las Rozas. El acto comenzará a partir de las 17:00 horas.
Sorteo calendario LaLiga 2022/23: cómo verlo por TV y online
El sorteo del calendario de LaLiga Santander 2022/23 se podrá seguir online a través de los canales oficiales de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Además, se podrá seguir toda la información del sorteo a través de AS.com.
Calendario LaLiga: normas
El sorteo se encargará de confeccionar el calendario de las 38 jornadas de LaLiga Santander. El calendario volverá a ser asimétrico, tal y como se lleva realizando desde la temporada 2018/19. En el acto se darán a conocer todos los emparejamientos de la temporada 2022/23.
Hoy, a las 17:00 horas, se conocerán los 380 partidos de Primera División y los 462 de Segunda de la próxima temporada. La campaña 2022-23 dará comienzo el fin de semana del 14 de agosto y se alargará hasta el 4 de junio en LaLiga Santander y hasta el 28 de mayo en LaLiga SmartBank en el caso de su fase regular; mientras que la promoción de ascenso se disputará del 4 al 18 de junio.
La Federación celebrará esta tarde el sorteo del calendario y con él cuándo se juegan los Clásicos, derbis y demás partidos de cada jornada. Se elegirá un calendario entre los 100.000 que se han elaborado con los condicionantes pedidos tanto por LaLiga como por los clubes. Hay equipos como el Villarreal, que tiene el estadio en obras y jugará en el Ciutat de Valencia mientras tanto y que ha solicitado disputar cuantos más partidos como visitante en la primera vuelta mejor. El Espanyol ha pedido jugar fuera la primera jornada; mientras que el Celta solicita ser visitante los primeros fines de semana de septiembre al tener que albergar un concierto. Hay otros condicionantes como intentar que exista proximidad geográfica en la jornada 15, la que se jugará durante los últimos días del año, incluido el 31 de diciembre, que por la relevancia de esa fecha se tratará de enfrentar a equipos de localidades próximas para que los futbolistas puedan despedir el año con sus familias.
LaLiga, por ejemplo, solicita que sea un calendario asimétrico, donde las jornadas de la primera vuelta no tengan por qué coincidir con las de la segunda o establecer estratégicamente las fechas de los Clásicos y derbis por compromisos con las televisiones y motivos de internacionalización. También hay criterios de seguridad que añadir a la hora de elaborar esos 100.000 calendarios, ya que se tratará de evitar que dos equipos de una misma ciudad coincidan como locales en una misma jornada o que no coincidan con ciertas festividades. Una de las peculiaridades de este calendario es que por primera vez en varios años no ha tenido que intermediar el CSD para desbloquearlo. Otros años ha existido fechas conflictivas para LaLiga y la RFEF en las que no alcanzaron un acuerdo. En esta ocasión, ha existido consenso, al igual que con AFE, que ha dado su visto bueno.
La temporada 2022-23 estará marcada por la disputa del Mundial a finales de año y no en junio-julio como viene siendo habitual. Tanto la Primera División, como la Copa del Rey y las competiciones europeas frenarán en seco a partir del 14 de noviembre. Entonces, los internacionales se unirán a sus selecciones para acudir a Qatar 2022. La Copa del Mundo arrancará el 21 de noviembre y la final se jugará el 18 de diciembre. El fútbol de clubes no volverá a reanudarse hasta el 21 de diciembre, cuando se juegue la segunda ronda de la Copa. El calendario de Segunda no sufrirá el Mundial, ya que los propios clubes votaron el pasado mes de marzo no parar. Consideran que apenas les afecta la Copa del Mundo, que son muy pocos los jugadores que se marcharán (unos 8 de los más de 500 inscritos) y el balón seguirá rodando en la categoría de plata. Aprovechando a captar la atención de las televisiones en un mercado audiovisual muy competido.
Primera División
Athletic, Atlético, Osasuna, Cádiz, Betis, Barcelona, Getafe, Girona, Rayo, Celta, Espanyol, Mallorca, Betis, Real Madrid, Real Sociedad, Valladolid, Sevilla, Almería, Valencia y Villarreal.
Segunda División
Albacete, Burgos, Leganés, Lugo, Mirandés, Tenerife, Alavés, Andorra, Cartagena, Granada, Levante, Málaga, Racing, Oviedo, Sporting, Zaragoza, Eibar, Huesca, Ponferradina, Ibiza, Las Palmas y Villarreal B.
Munir El-Haddadi vuelve a ser un verano más uno de los futbolistas transferibles del Sevilla. El delantero marroquí no encontró destino hace un año y luego, en diversas partes de la temporada, logró rebelarse contra el ostracismo y convertirse alguna vez en protagonista, pero no parece que vaya a volver a ocurrir así. Con apenas un año más de contrato en Nervión, el club blanquirrojo le busca una salida.
Y éste nuevo equipo podría haber estado al otro lado del charco, casi del mundo, en la Major League Soccer (MLS) norteamericana. Según Footmercato, Los Ángeles FC de California ha hecho una oferta al delantero que cubre la ficha que cobra en el Sánchez-Pizjuán y está dispuesto a pagar hasta cuatro millones de euros al Sevilla. Una propuesta que en el club ven mucho mejor que desde el propio futbolista que, siempre según la misma fuente, prefiere seguir en Europa.
Concretamente, el destino favorito de Munir se encuentra ahora mismo en la Ligue 1 francesa. El punta hispano-marroquí, internacional por la selección norteafricana, quiere ir al Mundial de Qatar y por eso elegirá quedarse en el Sevilla o ir a algún club de una liga importante. Esta última campaña, a pesar de la plaga de lesiones en la plantilla de Lopetegui, el concurso del futbolista de El Escorial ha sido bastante mediocre. Apenas tres goles en los 25 duelos donde ha actuado.
Para seguir yendo con su selección, eso también lo sabe el delantero, deberá jugar bastante más de lo que ha hecho este año en el Sevilla. Y en ese punto, el club blanquirrojo espera que finalmente acepte una de las ofertas que se le pongan sobre la mesa, condicionadas todas por el importante salario que cobra actualmente.
Con motivo de su 50 cumpleaños, Zinedine Zidane concedió una extensa entrevista al diario L’Équipe en la que fue preguntado sobre si algún día entrenaría al PSG. El técnico marsellés, que fue relacionado con los parisinos hasta que Al-Khelaïfi desmintió su pista en Le Parisien, no se cierra la puerta a entrenar algún día al vigente campeón de la Ligue 1.
“Nunca digas nunca. Especialmente cuando se es entrenador hoy en día. Cuando era jugador, podía elegir, casi todos los clubes. Como entrenador, no hay cincuenta clubes a los que pueda ir. Hay dos o tres posibilidades. […] Si vuelvo a un club, es para ganar. Lo digo con toda modestia. Por eso no puedo ir a cualquier parte”, reconoció Zidane en L’Équipe respecto a la posibilidad de entrenar un día al PSG.
Finalmente, el exentrenador del Real Madrid ha decidido esperar a la selección francesa, cuyo puesto de entrenador podría quedar vacante tras el Mundial de Qatar. En una entrevista este martes con Le Parisien, Al-Khelaïfi reconocía que no habían contactado nunca con Zizou, pero los medios franceses informaron de que sí hubo contactos entre el presidente y el técnico marsellés.
Su traspaso al Real Madrid como jugador: “Se siente extraño. Y en francos, con todos esos ceros. Debió de ser de unos 76 millones de euros (unos 100 millones de euros actuales en moneda constante). Era alucinante. No tenía otra opción. Así fue. La Juve tenía derecho a pedir lo que quería. Y el Real Madrid para pagar. Acababa de cumplir 29 años. Tenía algo de experiencia. Pero sabía que me lo estaba perdiendo, jugar en el Real Madrid. En algún momento, necesité esta salida para impulsar mi carrera. Llevaba cinco años en la Juve, lo había ganado todo excepto la Liga de Campeones. La perdimos dos veces (1-3 contra el Borussia Dortmund en 1997 y 0-1 contra el Real Madrid en 1998). Necesitaba este renacimiento, este nuevo reto”.
Su primer encuentro con Florentino: “Por supuesto que me acuerdo. Fue en Mónaco. La primera vez que nos vimos, todo se hizo allí. No hubo una segunda o tercera reunión para hacer las cosas. La primera fue la correcta. Hemos dicho que sí. Florentino Pérez es un hombre que no bromea. Cuando dice “vamos a hacerlo”, lo hace. Incluso tengo una anécdota que me hace reír hasta el día de hoy. Estábamos en una gran mesa en Mónaco para una cena de gala. No estábamos al lado del otro. Me invitaron a recibir un premio. Me pasó una servilleta. Dentro estaba escrito: “¿Quieres venir?” Y yo le contesté en un trozo de servilleta de papel: “Sí”. Todavía me pregunto por qué le contesté en inglés. Podría haber puesto “sí”, ya que él habla francés, o “si” en español, pero puse “sí”… A partir de ahí empezó todo. Hice cinco años. Ese es mi número. Me siguió.”.
Por qué escogió el ‘5′ en el Madrid: “Cinco años en la Juve, cinco años en el Real… Si un día alguien mira el lugar del número 5 en mi vida, que escarbe, hay cosas increíbles. Por ejemplo, participé en cinco victorias de la Champions con el Real Madrid: una como jugador (2002), otra como ayudante de Carlo (Ancelotti, en 2014) y tres como primer entrenador (2016, 2017, 2018). Incluso en mi vida familiar, vuelve. Cuando voy a un hotel, cuando estoy en la quinta planta, gano la partida. ¡Al 99 % ! Hay cosas especiales. En el Madrid, Florentino Pérez me dijo cuando firmo: “En mi equipo, los números van del 1 al 11. No hay 35 ni 40 en las camisetas. Y continúa: “El único que está libre es el número 5. Le contesté: “No hay problema, me lo llevo ahora mismo. Ese 5 me dio mucho”.
La victoria en Glasgow como jugador: “Ya tenía el de Burdeos, el Balón de Oro, la victoria de 1998, pero no éste. Gracias por esto. Me faltaba, ¡como este título! Con esa victoria en Glasgow, lo había ganado todo con casi 30 años. Y con el Madrid, y ese gol que nos dio la victoria. Este año también ha cumplido veinte años el gol: el 15 de mayo de 2002. Me acuerdo porque tres días después nació mi hijo Theo”.
El gol en Glasgow contra el Leverkusen: “El más bonito, no lo sé. No lo sé. Supongo que sí. Pero uno de los más importantes, sí. Lo necesitaba para ganar mi primera Liga de Campeones. También necesitaba ser decisivo con el Madrid en una gran final. Lo había hecho con la selección francesa, con la Juventus por otros trofeos, necesitaba marcar con el Real en mi primera temporada. Cuando lo hice, estuve más relajado. Las secuelas fueron sólo un extra. También había perdido tres finales europeas antes de ganar esta. Una con el Burdeos en la Copa de la UEFA (0-2, 1-3 contra el Bayern de Múnich en 1996) y mis dos en la Champions con la Juve. Esta cuarta final, no podía dejarla escapar. Arranca de un centro de Roberto Carlos que está… ¡podrido! Pero al final, su centro es hermoso. Hablamos de ello muchas veces juntos. Todo el mundo le decía: “¡Pero qué centro más podrido has hecho! Se reía y decía: “¡Es el mejor centro que he hecho nunca! Mira el resultado: si no te hubiera dado ese pase, no habrías marcado ese gol excepcional. Tiene razón. Después, ¿el gesto? Cayó bien en todos los niveles. Lo hice de todos modos en la final de la Champions. Y por mi primera y única victoria en este evento. También es para una final. Tienes que estar ahí en ese momento. Además, llega después de mis dos derrotas con la Juve y mis dos victorias con el equipo francés. Este gesto sólo ocurre una vez en la vida. Intenté hacerlo de nuevo, especialmente para los anuncios. Les habría gustado. Pero nunca fue bien recibido. Nunca lo he hecho así”.
Diferencias de ganar la Champions como jugador y entrenador: “Es diferente. Pero todo es hermoso. Como entrenador, eres responsable. Para 25 jugadores, pero no sólo. También para un club, para un nombre como el del Real Madrid y para una institución. Es una carga enorme que no llevas de la misma manera que un jugador. Cuando se gana, y además tres veces seguidas, es una gran y profunda sensación de deber cumplido a tu alrededor y para todo un club. Ganar la Champions nunca es cuestión de suerte. Es un trabajo duro. Especialmente tres veces seguidas. He trabajado como un loco. Trabajamos mucho. Mis jugadores creyeron en mí; yo creí en ellos. Lo hemos reunido. Es mucho trabajo con mi personal. Ganar como jugador no es la misma inversión. Como jugador, llegaba al entrenamiento a las 9 de la mañana. Salía a la 1 de la tarde y luego estaba en casa. Como entrenador, llegaba a las 8 de la mañana y a menudo me iba a las 11 de la noche. No son los mismos días ni la misma tensión. Aquí se trabaja y no sólo se trabaja para uno mismo. Nunca se detiene. Físicamente, a veces estaba en casa, pero mi cerebro seguía en el estadio. Ya estaba pensando en el entrenamiento del día siguiente, en lo que tenía que decir a un jugador”.
Le recuerdan una foto de su primera Champions contra el Atlético: “Me gusta esta foto porque estoy con mis jugadores. Éramos ellos y yo. ¡Momentos de extrema alegría! Son la recompensa a cinco meses de duro trabajo en mi debut como entrenador”.
Si esperaba ganar la Champions tras haber sido nombrado técnico en enero: “No. Porque cuando hago algo, lo hago para ganar. Soy un ganador, sin pretensiones. Vivo para ganar. Si no, no lo hago. No siempre se gana, pero hago todo lo posible por ganar. Cuando gano, no me sorprende porque lo he dado todo. He trabajado mucho. Y cuando trabajas, tienes derecho a ser recompensado. Cuando lo has dado todo, cuando lo has hecho todo, la victoria es tan bonita en la tanda de penaltis, como lo fue contra el Atlético en aquella primera final, como lo fue en el 3-1 contra la Juventus en 2017 o el 4-1 contra el Liverpool en 2018. La recompensa viene del trabajo. Y eso significa que te los mereces. En la victoria contra la Juve, nuestra segunda parte, también fue excepcional. Contra el Liverpool, veníamos de un campeonato complicado (3º por detrás del Barcelona y el Atlético de Madrid) pero esto fue la apoteosis contra ellos. Este éxito demostró los recursos de un equipo, un club, un grupo que siempre se ha negado a rendirse”.
La Champions más sentimental: “Si queremos afinar, sería contra la Juve. Es la que más ha logrado en el juego. Además, la Juventus… nunca la había ganado con ellos como jugador. Había jugado algunos grandes partidos, como contra el Ajax de Amsterdam en la vuelta de las semifinales de 1997 (4-1; ida: 2-1), pero no llegué hasta el final”.
Qué pensaría el Zidane de 1998 del Zidane actual: “Que se ha convertido en un hombre más. Alrededor de los 25 años, todavía hay pequeñas dudas. ¿Estamos haciendo las cosas bien? ¿Podríamos hacerlo mejor? Yo era así. A menudo quería que me tranquilizaran, que me dijeran: “Es bueno lo que haces. Hoy, es toda esa confianza, esa seguridad que ha cambiado y que he construido. Pero sigo siendo básicamente el mismo”.
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La portada de L’Equipe.
Su apodo del “Monje” en España: “Porque los periodistas se dieron cuenta de que no había mucho que informar sobre mí. Cuando llegué a Madrid en 2001, tuve gente a mi espalda todo el tiempo durante cien días. Siguiéndome constantemente, de la mañana a la noche y de la noche a la mañana durante más de tres meses. La prensa, todo el tiempo. Entonces tiraron la toalla. No les servía de nada. Habían visto mi pequeña vida. No había nada excepcional en ello. Mi vida es así. Siempre he sido tranquilo. Acepto la notoriedad. No tengo ninguna preocupación. Son los otros los que se cansan (sonrisa)”.
Por qué le llaman ‘Zizou’: “Fue Rolland Courbis en el Cannes el que empezó a llamarme así. Al principio me llamaban Yazid en la prensa, luego Zinedine y finalmente Zidane, que es como me bautizaron”.
Sus planes de futuro: “Continuar entrenando. Todavía quiero hacerlo. Y después, por qué no estar en un proyecto en el que yo mismo soy el líder. Presidente de un club o gerente de una empresa, por ejemplo. Ya he empezado con el Grupo Z5, que iniciamos en familia, especialmente con mis hermanos Farid, Nordine, James y mi hermana Lila. Pero aún no estamos ahí. Me gustaría hacer un proyecto con gente que me guste, que sea competente y de confianza. En la vida hay que saber rodearse de buena gente”.
Si quiere ser seleccionador: “Quiero hacerlo, por supuesto. Lo seré, espero, algún día. ¿Cuándo? Eso no depende de mí. Pero quiero cerrar el círculo con la selección francesa. Conocí a este equipo francés como jugador. ¡Y es lo mejor que me ha pasado! (Pone la mano sobre su corazón.) ¡Pero de verdad! Es la cúspide. Así que, como viví aquello y ahora soy entrenador, la selección francesa está firmemente anclada en mi cabeza. ¿Suceder a Deschamps? No lo sé. Si hay que hacerlo, se hará, en ese momento o no. Cuando digo que quiero llevar la selección francesa algún día, lo asumo. En la actualidad, se ha creado un equipo. Con sus objetivos. Pero si después surge la oportunidad, allí estaré. Una vez más, no depende de mí. Mi deseo más profundo está ahí. La selección francesa es lo más bonito que hay”.
El día de su debut con Francia: “Llego a la reunión. Sólo hay una reunión entre los jugadores antes del almuerzo. No fui… Me llaman a la habitación: “¿Qué haces? Respondo: “Acabo de llegar. Esta reunión no es para mí”. Finalmente bajé las escaleras. Dije que lo sentía y todos los chicos me aplaudieron. Luego entré (en el minuto 63 en lugar de Corentin Martins). Estábamos perdiendo 2-0. Marqué dos goles. Un disparo a pase de Laurent (Blanc). Paso las piernas y tiro con el pie izquierdo. A continuación, un cabezazo de Jocelyn (Angloma) a la salida de un córner. Es mi primer doblete. Eric Cantona se portó muy bien conmigo. Era el capitán. Me dio el banderín para el partido”.
Quién era Zidane a los 10 años: “Un fanático del fútbol. Cuando tenía 10 años, era Sevilla casi el día de mi cumpleaños. Recuerdo aquella semifinal (en el Mundial, contra Alemania Occidental, 3-3, 4-5 en los penaltis). 1984, esa Eurocopa también (ganada por Francia, 2-0 contra España en la final). 1986, México, Maradona, ¡una locura! Cuando tenía 14 años, Maradona me tenía hechizado. Todavía hoy veo partidos de 1986. No sólo las imágenes. Los partidos. Todo el mundo se acuerda de Inglaterra, de sus dos extraordinarios goles (2-1 en cuartos de final), pero también está el Argentina-Bélgica (2-0 en semifinales). Fue magnífico. Es increíble lo que hizo Maradona en el campo. Pero mis primeros grandes recuerdos son de Sevilla. El partido con mi padre, con mi familia. Schumacher, Battiston abajo. Giresse y su alegría, la recuperación de Trésor… Bossis agachado tras su penalti. Es como si fuera ayer en mi cabeza. También era la época de Téléfoot. Estaba luchando por ver imágenes. Fútbol extranjero. En cuanto oí los nombres, fueron míticos: Nottingham Forest, Ipswich Town, Borussia Mönchengladbach… ¡Salté!”
Su ídolo era Francescoli: “Enzo Francescoli era mi ídolo (internacional uruguayo que jugó en el Matra Racing y luego en el Marsella). Era más que mi ídolo. Yo era un fanático suyo. Era algo más que una mera imitación. Solía analizar todo lo que hacía. Tuve que volver a hacerlo en el campo. He practicado hasta que lo he hecho bien. Observé todo, con una lupa, para reproducirlo. Además, yo iba al estadio en esa época (1989-1990). Estaba en la parte superior del Velódrome, detrás de la portería. También me encantaba Karl-Heinz Förster (Marsella, 1986-1990), Blaz Sliskovic (1986-1987), que metía córners directos. También estaba ‘JPP’ (Jean-Pierre Papin, 1986-1992) después, y contra quien incluso jugué más tarde. Pero todo lo relacionado con Enzo Francescoli me fascinaba. La técnica con sus contactos de fuera a dentro y de dentro a fuera. Era de encaje. Creo que, en cierto modo, llegué a parecerme a él. Técnicamente, en cualquier caso, Enzo era majestuoso. Dormí con su camiseta tras intercambiármela con él en un Juventus-River de 1996 en Tokyo”.
Pudo fichar por el Marsella como jugador: “En 1992, cuando fui a Burdeos. El OM estaba sobre mí. También tuve esta posibilidad. Pero me fui al Girondins bajo la dirección de Rolland Courbis, que también se había llevado a Eric Guérit y a Jean-François Daniel del AS Cannes”.
Entrenar al PSG: “Nunca debe decir nunca. Especialmente cuando se es entrenador hoy en día. Pero la pregunta es irrelevante. No es en absoluto relevante. Cuando era jugador, podía elegir, casi todos los clubes. Como entrenador, no hay cincuenta clubes a los que pueda ir. Hay dos o tres posibilidades. Esa es la realidad actual. Como entrenador, tienes muchas menos opciones que como jugador. Si vuelvo a un club, es para ganar. Lo digo con toda modestia. Por eso no puedo ir a ninguna parte. También por otras razones, es posible que no pueda ir a todas partes”.
Cuando quiso retirarse de la selección: “De hecho, en 2004, estuve a punto de dejarlo todo. Todo. Todo. A los 32 años. Pero sólo duró un segundo en mi cabeza. Fue en el primer descanso internacional. Me voy de vacaciones con mi mujer y mis hijos durante los pocos días que dura el descanso. Los disfruto. Es genial. Pero vuelvo y mi primer pensamiento es: me falta algo. Tuve que volver a la selección francesa. Tardé un segundo en decirme a mí mismo, voy a dejarlo todo, y tardé tres días en decirme, ¡tengo que volver a la selección!”.
La victoria en 2006 por 3-1 ante España: “Habíamos tomado las llaves. À 100 %. Nos teníamos el uno al otro cada noche antes de un partido. Habíamos encontrado un lugar para nosotros. Fue excepcional. ¡Comimos merguez de Berlín porque he oído que son los mejores! Momentos maravillosos, durante cuatro horas en la mesa. Había una verdadera cohesión. Fue en una pequeña posada en medio de la nada, a pocos kilómetros de nuestro hotel. Un ambiente fabuloso”.
Jugó lesionado en 2006 ante Brasil los cuartos del Mundial: “De hecho, me lesioné contra España. Me lesiono cuando marco el tercer gol al final del partido. Tengo una molestia en el muslo. Casi nadie lo sabía. Voy a hacerme pruebas. Me dicen que no puedo jugar contra Brasil… Yo digo: ‘¿Qué? Es imposible que no juegue contra Brasil. El personal médico hizo todo lo posible para que yo jugara, porque tenía muchas ganas de jugar este partido. ¡Y he jugado! Cada partido podría haber sido el último. Tenía tantas cosas en la cabeza que era imposible que no jugara contra Brasil. Quería disfrutar de cada segundo”.
El panenka ante Italia en la final: “Pero es el minuto 7. Quedan 83 minutos todavía. Tengo que probarlo. Incluso si lo fallo, puedo compensarlo después. Todavía hay tiempo. Y me enfrento a uno de los mejores porteros del mundo con “Gigi” (Buffon). Me conoce. Tengo que sorprenderlo. Dura diez segundos en mi cabeza. Nunca he hecho un panenka. Pero no es una falta de respeto. Sé que algunos porteros pueden interpretarlo así. Pero ese no es el caso aquí. No voy allí para eso, para humillar. Voy allí a marcar”.
El cabezazo a Materazzi: “Ese día, mi madre está muy cansada. Tengo a mi hermana al teléfono varias veces durante el día. Sé que mi madre no está bien, pero tampoco es demasiado grave. Pero sigue siendo una preocupación. Sigo concentrado. Pero todo son cosas que surgen. La presión, esto y aquello. Él (Materazzi) no me habla de mi madre. A menudo ha dicho que no insultó a mi madre. Es cierto. Pero sí insultó a mi hermana, que estaba con mi madre en ese momento. En el campo ya hubo insultos. Todos hablan entre sí, a veces mal, pero tú no haces nada. Ese día, pasó lo que pasó. Él provocó algo al hablar de mi hermana Lila. Fue sólo un segundo y se fue… Pero luego hay que aceptarlo. No estoy orgulloso de ello, pero es parte de mi trayectoria. En ese momento, era más frágil. Es a veces en estos momentos cuando puedes hacer algo que no está bien… Así es como termina. Thierry Gilardi tenía razón en sus comentarios: “Así no…”. Pero eso es todo. Así es. Es difícil. Pero es mi carrera. La historia de mi vida. Como mis dos goles en la final de 1998. Por eso digo que el equipo francés no está acabado. De alguna manera no quiero terminar así. No ha terminado”.
Ganarse el respeto de jugadores como Benzema o Cristiano: “Ayuda haber experimentado lo suyo. Pero, sobre todo, no hay que querer ser más que ellos. Eres el entrenador, no hay problema. Tú eres el que dicta la ruta, pero por otro lado, no debes meterte con ellos. Ellos son los que marcan la diferencia en el campo. Y no tengo ego por eso. He estado en estas situaciones con muchos entrenadores o jugadores que querían ser más que los demás. En algún momento, no funciona. Voy a ser básico al decir esto, pero cuanto más grandes e importantes son los jugadores, más fácil es. Realmente lo es. Saben lo que hacen. Están concentrados. Saben a dónde van. El vínculo que tengo con ellos es sobre un partido concreto, sobre acciones específicas, tácticas, el rival. Por eso también me encantó y me encanta dirigir a grandes jugadores”.
Benzema: “Karim no tuvo que progresar. Pero le gustaba quedarse después de las sesiones colectivas. Frente a la portería, le di dos o tres consejos, pero a cambio. A mi personal y a mí nos gustaba quedarnos con uno o dos jugadores. Incluso con el portero. Estaba disfrutando. ¡Mis pies siguen ahí! Hicimos ejercicios divertidos. Desafíos. Y aun así, a menudo ganaba. Yo también me metería en los toros. Me encanta estar con mis jugadores, jugar con ellos. Es una forma de transmitir cosas (…) Hay afecto. Karim es como el hermano pequeño que nunca tuve. Soy el último de la familia y nuestra relación ha crecido a pasos agigantados. Nos conocimos cuando llegó al Madrid, cuando yo era asesor del presidente y luego segundo de Carlo (Ancelotti). Ahora nos vemos un poco menos. Nos enviamos mensajes. Pero él sabe dónde estoy. Sé dónde está. No me sorprende. Es sólo continuidad. Sabía que era capaz de lo que hace. Fue muy bueno todo el tiempo en el Real Madrid. Lo único es que ahora es excepcional”.
El Balón de Oro: “No soy sólo yo quien dice que se lo den, ¡es todo el mundo! Es más que merecido”.
Su relación actual con el Madrid: “Todavía tengo conexiones. Voy al estadio siempre que estoy allí. Tengo una caja. Mis hijos y amigos también lo disfrutan. Estuve en el Stade de France para la final contra el Liverpool (1-0, 28 de mayo)”.
Si el doblete en 2017 fue el momento más emocionante como entrenador del Madrid: “Es fuerte porque es más difícil. Es fantástico ganar la Champions. Pero lo más difícil y bonito después de toda una temporada es ganar la Liga. Cuando juegas 38 partidos y eres campeón, es fabuloso. La Champions es prestigiosa, muchos prefieren ganarla, pero la dificultad de la Liga la hace aún más magnífica. Premia la rutina diaria, la preparación de cada partido, cada sesión de entrenamiento. La Liga de Campeones consta de 13 partidos que van in crescendo en intensidad. Los jugadores están ahí y más aún en los grandes partidos de la eliminatoria. Pero en la Liga hay que estar siempre en ella. Así que ambos, el doble como en 2017, es enorme”.
La acción más emocionante como técnico del Madrid: “Eso también es difícil. ¿El gol de Bale contra el Liverpool? ¿El gol de Cristiano en la Juventus? Igual, su chilena, es que… Vas a Turín y ganas 3-0 así (en la ida de los cuartos de final, en 2018; vuelta: 1-3). Estoy alucinando. Eso es lo más destacado de un entrenador. También está el gol de Cristiano, de nuevo, cuando ganamos a la Roma en mi debut en la Liga de Campeones en el banquillo (2-0 en los octavos de final en marzo de 2016; vuelta: 2-0). Todos los jugadores se acercan a mí y saltan a mis brazos. Es conmovedor. Puedes sentir, puedes ver en la foto que soy como un niño. Viví estos momentos como jugador, y es otro nivel como entrenador”.
EI niño que puso la primera piedra en Valdebebas hace 18 años es ahora un peso pesado del vestuario que ha ganado cinco Champions con él en el once titular. Dani Carvajal (30 años) ha completado una temporada de ensueño tras sufrir en 2021 un calvario con las lesiones. El canterano coge galones, es cuarto capitán y pasa revista con AS a su evolución dentro de la entidad y a su crecimiento personal.
Es su última entrevista como soltero, ¿hay nervios?
No suelo ponerme nervioso, pero ya aflora ese gusanillo para que todo salga bien y todo el mundo esté a gusto. Que todo esté en armonía. Más preocupación que nervios.
¿Habrá alguna réplica de la Champions en la boda?
Mi mujer quería poner una réplica de la Champions y otra de la Liga 35, pero le dije que la gente iba a estar más pendiente de hacerse fotos con las réplicas que de la boda (sonríe).
Vuestro pequeño, Martín, solo tiene año y medio y ya tiene una Champions. La actual generación es una privilegiada.
Muchas veces lo hablamos entre nosotros, de lo que estamos consiguiendo, que al final parece que se normaliza. Pero hablando con compañeros o la familia creo que dentro de unos años se valorará mucho más esto que estamos consiguiendo. No es nada fácil. De hecho, desde que lo logramos nosotros, ninguno había conseguido con el nuevo formato de Champions ganar dos Copas de Europa seguidas y nosotros ganamos tres. Yo llegué justo el año de Lisboa y he podido estar en las cinco. Es fantástico. Es un orgullo y un privilegio estar o haber ayudado al club a hacer historia en una de sus épocas más doradas.
¿Qué le dice el 12 de mayo de 2004?
Claro. Ahí pusimos la primera piedra de Valdebebas…
Usted era muy rubio…
Sí (sonríe), nací muy rubio y ahora soy más moreno. Mi niño es rubio también… por ahora.
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Dani Carvajal, junto a Alfredo Di Stéfano, en el acto de colocación de la primera piedra de la Ciudad Real Madrid de Valdebebas, el 12 de mayo de 2004.Jesús AguileraAS
Si le dicen que 18 años después iba a ganar cinco Champions y en todas titular…
Sí, creo que es un dato que solo Karim (Benzema) y Luka (Modric) pueden compartir conmigo. Me siento muy orgulloso de haber ayudado al equipo en las cinco desde el once titular. Habla un poco de lo difícil que es estar en este club al pie del cañón y mantenerse durante tantos años como titular. Por eso Marcelo, Sergio (Ramos), Iker (Casillas), Raúl… jugadores que han estado muchísimos años siendo titulares, con la exigencia que requiere esta camiseta, es para valorarlo.
¿Me puede explicar lo ocurrido en esta Champions?
Nos metimos en una fase de grupos buena que se nos complicó con la derrota ante el Sheriff, pero el resto los sacamos bien y fuimos primeros. Esperábamos un sorteo más favorable que el que nos tocó. Finalmente fue con el PSG. Esa eliminatoria lo marcó todo. En la ida no estuvimos bien. Casi ni chutamos a puerta. Lo mejor fue el resultado, perder por la mínima. En la vuelta igual, íbamos perdiendo con una eliminatoria con dos goles en contra y bueno, la magia del equipo, de la presión de Karim para forzar el error de Donnarumma… Todos vimos esa ventana abierta, para ir por ahí. Nos dimos cuenta, también los jóvenes, que no habían vivido esas noches de Champions, de lo que es capaz de hacer el Bernabéu. A partir de ahí parecía que nos gustaba sufrir y remontar. Y así ha sido. Contra el Chelsea hicimos un gran partido en la ida y en la vuelta ellos no tenían nada que perder. Son los partidos más difíciles de jugar, con el rival volcado y tú sin querer dar un paso atrás. No lo afrontamos de la manera adecuada. Y ante el City pues imagínate. La magia. En dos minutos forzar la prórroga y ya ahí, en la prórroga, sabíamos que íbamos a pasar seguro…
Usted dio la asistencia a Rodrygo en el 2-1, que permitió la prórroga. Sin esa ‘bananita’ a lo mejor no hay Decimocuarta.
Sí, está claro que al final todos hemos aportado nuestro granito de arena. Los que han jugado más y los que han jugado menos, ha sido la clave de este grupo. Todo el que salía aportaba. Se veía desde el banquillo. Contra el Chelsea yo acabé de central. Una defensa un tanto inédita. Acabamos el partido con David (Alaba), Lucas, Marcelo y yo. No estaban ni los tres del medio, Casemiro, Luka, Toni. Eso habla también de la plantilla tan amplia y buena que tenemos.
Pues de central lo hizo bien.
Al final, pienso que la experiencia de tantos años y tantos partidos a este nivel hace que tu nivel de colocación y concentración sean tan altos que los conceptos básicos los tienes. Querer es poder, como se suele decir. Si la cosa sale bien y uno pone todo de su parte, obtiene al final la recompensa merecida.
Junto con la final de Cardiff, la de París fue su mejor partido con el Madrid. Anuló a Luis Díaz. Usted jugó al 150%.
Llegué muy bien al último tramo de la temporada y quería hacer valer esas cuatro finales de Champions y esos cuatro títulos a mis espaldas, con el colombiano que era su primera final. Quise estar cerca de él, sé el peligro que podía conllevar y creo que le gané la partida en gran parte del partido. Ahí estuvo un poco la clave. En los duelos defensivos fuimos muy superiores en muchos detalles del partido. Y la actuación de Thibaut, que nos salvó en varias ocasiones.
¿Cómo se hace para ganar las últimas ocho finales sin fallo?
Creo que es más lo que siente el rival que lo que sentimos nosotros. Nosotros vamos a por todas. Sabemos que, aunque estemos muy mal y no sea nuestro día, tendremos nuestras ocasiones y que, si seguimos dando martillazos, encontraremos premio. Influye más al rival, tengo al Madrid delante, el Madrid no pierde finales, el Madrid sabe competir las finales… En París, el equipo hace el gol y un partido práctico. Sabemos lo que hay que hacer en cada momento, que ellos dejarán espacios y esa la clave: manejar los tiempos del partido correctamente para ganar la copa.
¿Ve normal que haya aficionados que ya estén sacando billetes para Estambul, para la final del año que viene?
(Ríe) Yo les animo. Nosotros intentaremos llegar a la final, claro. Sería fantástico. Pero poco a poco. Queda mucho trabajo, estamos viendo que todos los rivales se están reforzando bastante. Me hace gracia que la gente me dice muchas veces: ‘He ido a todas las finales y las hemos ganado todas’. Y pienso, claro, si llevamos sin perder una final desde hace… (ríe). Me hace gracia. Es una anécdota graciosa.
“Animo a nuestra afición a que saque billete para la final de Estambul, pero poco a poco…”
Carvajal, sobre la 15ª
La temporada pasada solo pudo jugar 15 partidos por las lesiones. ¿Qué cambió este año en el que ha jugado casi 40?
Gracias a la nutricionista, se veía que el gluten no era beneficioso para mí. Me inflamaba y asumes más riesgo para competir. También una suplementación específica, dependiendo del mes de competición. También el descanso. Trabajo con el fisioterapeuta. Trabajo mental también, en nuestros partidos, como la final o la vuelta contra el City… Asumiendo prórroga contra el Chelsea… Mi nivel de excitación en años anteriores era demasiado elevado y eso hace que el músculo necesitase más oxígeno, más sangre y al final lo debilitaba. El cómputo de todo hace que pueda decir que estoy feliz con mi rendimiento y liberado. Alguna vez puedo tener algún golpe, pero esa rueda negativa puedo decir que he salido de ahí.
¿Echa uno de menos la leche de vaca o la carne roja o aprende a vivir con ello?
Carne roja puedo comer (ríe), quizá un día cada semana o cada dos. Puedo pollo, pescado… Soy de buen comer. Me encanta todo y no hago ascos a nada. Eso lo hace más sencillo.
Nadie habla ya de fichar laterales derechos. Ha conseguido disipar eso. No es fácil ser dueño de un puesto en el Real Madrid.
Nunca es fácil, sobre todo cuando tu rendimiento no es el esperado. El club quiere reforzar la plantilla y es lógico que intenten fichar a gente joven. Los años pasan para todos y el club está haciendo un trabajo fantástico. Con Vinicius, Rodrygo, Camavinga, Asensio en su día… Con todos. Está fichando gente con experiencia como Rüdiger o David (Alaba), que han llegado gratis. O como Tchouameni…
¿Cómo lo ha pronunciado? Parece que la ‘T’ no se pronuncia, es ‘Shuamení’.
No es fácil, no… Intentaremos buscarle un nombre de pila más sencillo (risas). Pienso que más allá de que el futuro esté garantizado, el resultado a día de hoy se está viendo. El club sigue ganando, con esta gente joven esto va para arriba y creo que en ese sentido podemos estar tranquilos.
Ancelotti tiene buena culpa de todo esto. ¿Qué tiene para que sea como un segundo padre y esa afinidad con el grupo?
De cara al grupo es un líder, un referente para todos, cada vez que habla todo el mundo pone los cinco sentidos para escucharle y comprenderle. Él logra la armonía en los que juegan más, los que juegan menos, intenta entender a todos, él ha sido futbolista y sabe que el no jugar no es una situación ideal. Es un grandísimo entrenador y sabe cómo plantear los partidos, pero destaca en la manera de tratar a los jugadores.
“Es un líder. Cada vez que habla el grupo pone los cinco sentidos para escucharle”
Carvajal ensalza la figura de Ancelotti
¿Qué les dijo tras el fiasco del Clásico? ¿Qué hizo para que el equipo no perdiera confianza en sí mismo y reaccionara a tope?
El Barcelona fue mejor en ese partido. Siempre es duro perder en casa ante tu máximo rival con un resultado contundente. De hecho, ese parón FIFA nos vino muy bien. El míster nos transmitió tranquilidad, nos dijo que solo eran tres puntos. Si vas a Vigo y pierdes son tres puntos igual. El míster nos dijo: “Nos hemos generado con trabajo y con esfuerzo poder perder ese partido’’. Ese mensaje fue clave para ganar en Vigo y pienso que la Liga se decide en Sevilla, cuando el equipo remonta y provoca que el Barça al día siguiente, ese lunes, pierda en casa con el Cádiz.
El Madrid ha ganado Liga, la Copa de Europa y la Supercopa de España y aun así se pone en duda su estilo…
¿Sabes lo que pasa? Que cuando uno gana y el resto no lo hace, poca gente entiende que el rival ha sido mejor en ese sentido. Al final en esto del fútbol no gana el que más chuta a puerta, ni el que más posesión tiene, ni el que más pases da al campo contrario, ni el que más hace vibrar al espectador, gana el que más goles mete y el que menos goles encaja. En eso hemos sido los mejores, pero no solo en esta temporada. Que hayamos ganado cinco Champions de las últimas nueve habla de que, si tu juegas mal y solo vale ganar, no ganas cinco Champions en nueve ediciones. Tienes que tener algo más. Son respetables todas las opiniones, pero yo hablo desde dentro, de que nosotros probablemente tenemos una de las mejores plantillas del mundo y que la magia, y ese creer, esa fuerza, o como dijo Guardiola hace poco, ‘el Madrid va perdiendo de dos y a nadie le quema el balón’. Eso no todo el mundo puede presumir de tenerlo.
“Si tú juegas mal no ganas cinco Champions en nueve años. Ya lo dijo Guardiola”
Carvajal, acerca de las críticas al estilo del Madrid
¿Calidad? El Madrid tiene dos veteranos que son los mejores del mundo en su puesto: Luka Modric y Karim Benzema.
Son los mejores peloteros. El equipo propone, pero también sabe jugar, sabe que con un equipo superior a veces, tienes que saber juntarte, buscar los espacios de otra manera. Si todo fuera A o B sería muy aburrido, si todos los equipos jugasen a lo mismo. Es lo bonito del fútbol, que la táctica y cada manera de afrontar los partidos sea diferente, entonces creo que eso da valor a lo que estamos haciendo nosotros. Pero si alguno se consuela con lo de que solo nos vale ganar respeto su opinión, pero no estoy para nada de acuerdo.
Esa química que tenéis con el Bernabéu os puede hacer más fuertes para los años que vienen. Y encima el nuevo Bernabéu con esa nueva escenografía…
Creo que este año el público y el estadio han sido un parte fundamental para conseguir tanto la liga como la Champions. El City te marca en el 75′ y necesitas marcar dos goles para remontar. Y todo el mundo sabía que podía pasar. Eso nos dio alas, nos dio muchísima energía para remontar y salió cara en la moneda. Gracias también a eso.
Pasa a ser cuarto capitán, por detrás de Benzema, Nacho y Modric. Ya lo era un poco por su carácter y personalidad, pero ser cuarto capitán le dará un plus más de satisfacción interna.
Sí, la verdad que sí. Me hace mucha ilusión. Estoy muy orgulloso de poder pertenecer a ese grupo de los cuatro capitanes. Es ese plus de que tienes que luchar aún más por tus compañeros y estoy orgulloso de que haya pasado el tiempo y seguir siendo una pieza importante. Al menos así me lo hace saber el club.
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Nacho y Carvajal, de la Fábrica a ser capitanes del Real Madrid.PEPE ANDRESDIARIO AS
El primer capitán es Karim Benzema. Nadie duda que debe ganar este Balón de Oro.
Nadie, cualquier otro candidato está lejos de él. No solo lo que nos ha ayudado a conseguir, que ha sido una parte importantísima. En porcentaje alto ha sido el que nos ha llevado a los éxitos: los goles que ha marcado, las asistencias que dio… Quien haya visto a Karim, no pone en duda que es suyo el Balón de Oro.
Los jóvenes están cuajando. Camavinga, Rodrygo, Vinicius… ¿Les ha sorprendido el nivel al que ha llegado este año Vini?
Los que entrenamos con él sabemos del potencial que tiene y que este año ha explotado. Todo el mundo lo ha visto. Como dijo Karim, puede estar entre los cinco mejores del mundo sin ninguna duda, pero quiero remarcar mucho todo el trabajo que ha hecho. Llegó muy joven y se le ha metido mucha caña. Con el desacierto a portería, se hacían incluso memes, la gente es muy crítica. No es fácil ser tan joven y vestir esta camiseta. A muchos les ha pasado, tener ese miedo a fallar y al final no ser tú mismo. Él ha tirado para delante, se ha echado eso a la espalda y ha podido con todo. Tiene todo mi respeto por eso, porque no es nada fácil. El chico se ha ganado una buena renovación y ojalá que esté aquí muchos años.
Otro jugador ha tenido un calvario con las lesiones, que usted sabe bien lo duro que es. Llamó la atención la piña que le hicieron en torno a Hazard en Cibeles. ¿Cree que este año veremos al fin a ese Hazard del Chelsea que era un Top-5 mundial?
Creo que sí. Cuando supere ese problema, también mental. Cuando coja ritmo, partido tras partido, será un jugador impresionante como ha demostrado tantos años. Y la piña que hicimos habla de lo buena persona que es. Ha pasado un calvario, pero llegaba a Valdebebas, hacía su trabajo y nunca ponía una mala cara. No todos puede hacerlo.
Hemos visto a jugadores como Tchouameni o Rüdiger que tenían ofertas más importantes. Ya ocurrió con Alaba y Camavinga. Los jugadores vienen al Madrid independientemente del tema económico. Mbappé se quedó fuera. Deportivamente no parece que vaya a acertar. ¿Cómo se vivió eso en el vestuario, os dio energía extra para la final de la Champions?
Los jugadores, como Antonio, Camavinga… deciden venir al Madrid porque saben lo que significa venir a este club, todo lo que envuelve al club es gigante. Lo vivirán y lo comprobarán dentro de poco. David (Alaba) ya lo ha visto. Respecto al tema Mbappé, parecía que estaba prácticamente hecho. Estaba agotando su contrato, pero al final ha decidido quedarse. Ha tomado esa decisión. Lo habrá valorado con su entorno, puesto una balanza de pros y contras y hay que respetar las decisiones de cada persona. Se queda en París para intentar ganar la Champions con ellos. A veces hay trenes que solo pasan una vez… No quiero cerrarle la puerta, ni mucho menos, pero en el futuro no sabes lo que va a pasar. Un alto porcentaje de jugadores en activo, si el Madrid llama a su puerta ni se lo pensaban. Él ha tomado esa decisión. Está en su ciudad y ha estado sometido a bastante presión. Es el referente, el ídolo, la estrella y quiere hacer historia con su club. Me parece lícito. Pero el Madrid va a estar ahí, ha estado y estará. El Madrid está por encima de todos.
Y para acabar, se asienta usted en la Selección con Luis Enrique. ¿Cree que podemos soñar para el Mundial de Qatar?
Estamos muy, pero que muy ilusionados. El míster ha logrado hacer un núcleo, un grupo de 50 jugadores. Queremos que la gente se enganche y vuelva a creer. En la última Eurocopa llegamos a semifinales. Nos quedamos a las puertas de la final por penaltis. Será un Mundial bonito, atípico. En Navidad, en invierno. A España la meto entre las cinco o seis candidatas a ganar…
Todos recordamos el día de los Santos Inocentes en el mundo de la prensa deportiva y es una sana costumbre publicar noticias falsas en tono de broma para conmemorar esa efeméride. Es habitual encontrar en las redes sociales o en los medios de comunicación, bromas, que muchas veces calan como noticias. Muchos lectores despistados se despiertan ese día con noticias inesperadas o sorprendentes. Miro el calendario y no es 28 de diciembre, ni muchísimo menos, pero la actualidad del Real Valladolid a día de hoy parece haberse convertido en el día de los Santos Inocentes de forma permanente.
Primero con la presentación del diseño del nuevo escudo del Real Valladolid, que en una temporada muy bonita donde se ha logrado el ascenso de forma brillante y había unido un poco más a la afición del Pucela con los dirigentes del club, no hace más que provocar una fractura entre la masa social del club y Ronaldo. ¿Se identifica la afición del Real Valladolid con el nuevo escudo? Pienso que no, en una amplia mayoría, no ha sido un diseño muy afortunado. El club, con Ronaldo al frente, sin preguntar a la afición, ha cambiado el símbolo más preciado para ellos. De lo que más orgulloso se siente el aficionado del Real Valladolid es de su escudo y de sus colores. El astro brasileño tiene, legalmente, todo el derecho de cambiar el escudo, para eso es el presidente y el máximo accionista del club, pero moralmente es ciertamente reprobable.
El fútbol es de los aficionados y ellos son la parte más importante de este espectáculo. Todos hemos visto la importancia de la afición en los estadios durante la reciente pandemia, Y es que el fútbol sin aficionados es otro deporte completamente diferente. ¿Hubiera descendido el Real Valladolid, la pasada temporada, si la afición hubiera podido alentar a su equipo? ¿Hubiera ascendido de forma directa el Pucela esta temporada sin apoyo de su afición? Mi opinión es que con el calor de su afición el Real Valladolid no hubiera descendido a Segunda, ni habría ascendido de forma directa esta campaña. Para los diseñadores gráficos y ‘community manager’, quizás este escudo pueda ser un acierto, pero para la gran mayoría de la afición del Pucela es un puñal que se clava en lo más profundo de su corazón. ¿Y quiénes son los que acuden al José Zorrilla cada fin de semana? ¿Quiénes son los que acompañan al Pucela en todos sus desplazamientos? ¿Quiénes son los que compran cada temporada la nueva camiseta? ¿El diseñador gráfico que ha diseñado el nuevo logo del club o la afición del Real Valladolid? Este jueves 23 de junio hay convocada una concentración pacífica por la defensa del que la afición considera su escudo en el aparcamiento de Fondo Norte en el estadio José Zorrilla organizada por la Federación de Peñas del Real Valladolid.
Segundo, con los rumores de los fichajes de Dani Alves y Marcelo, donde el primero puede venir al Real Valladolid para poder jugar en noviembre el Mundial de Catar con la selección brasileña y el segundo para poder estar más cerca de su familia en Madrid. Además de que económicamente es poco probable, deportivamente me parece un disparate. ¿Qué estará pensando ahora mismo Pacheta? En el supuesto que vinieran estos dos futbolistas, lógicamente su prioridad es jugar, es decir, condicionarán las alineaciones del entrenador burgalés. Después de la pedazo de temporada que se ha marcado Luis Pérez en el lateral derecho podría verse relegado a la suplencia por un futbolista de 39 años… No me digan que no parece el Día de los Santos Inocentes, aunque no estemos a 28 de Diciembre.
Esperemos que las aguas vuelvan a su cauce y todo pueda tranquilizarse un poco. Afición y club juntos de la mano se ha demostrado que son invencibles, no rompamos esa magia después de una temporada tan bonita e ilusionante cuyo desenlace fue el ascenso a Primera División. Intentar equivocarse muy poco este mercado de fichajes es fundamental para lograr la permanencia en la categoría de oro del fútbol español esta temporada y, sobre todo, fichar gente joven con ilusión, talento, compromiso, hambre de gloria que se dejen cada gota de sudor por el Real Valladolid. Para eso también hay que mirar un poco la historia del Pucela y no sólo para cambiar un escudo.
Uno de los principales afectados por el nuevo rumbo que está cogiendo el proyecto del vigente campeón de la Ligue 1 es Neymar. Al ser preguntado sobre si el brasileño puede salir en verano del PSG, Al Khelaïfi no confirmó ni desmintió si realmente está afectado por la nueva política que ha decidido asumir el club: “Queremos jugadores que amen al club, que amen luchar, que amen ganar. Y queremos que esa mentalidad se extienda por todo el club (…) Lo que puedo decir es que esperamos que todos los jugadores hagan mucho más de lo que hicieron la temporada pasada. Mucho más. Todos tienen que estar al 100%. Obviamente, no éramos lo suficientemente buenos para llegar lejos. Para la próxima temporada, el objetivo es claro: trabajar cada día al 200%”.
Sin embargo, estas palabras de Al Khelaïfi no suponen un riesgo para Neymar. De hecho, el brasileño, según L’Équipe, tiene una cláusula en su renovación de hace un año y medio hasta 2025 que le renueva automáticamente, a partir del 1 de julio, hasta 2027 con los parisinos, lo que complicaría todavía más su salida de la capital francesa en verano. Ney tiene únicamente entre ceja y ceja brillar en el PSG y su venta es una utopía en estos momentos.
El brasileño, que fue renovado hace un año y medio hasta 2025, vive uno de los momentos más críticos de su carrera en París. Sus continuas lesiones y su falta de regularidad han provocado que el Emir de Qatar ya no le considere intocable. Según informan en Francia, si llega una oferta satisfactoria por Neymar, el PSG no se opondrá a su salida. El principal problema para sacarle de la capital francesa es su alto salario. Es, tras Mbappé y junto a Messi, el mejor pagado de la plantilla y, actualmente, hay muy pocos equipos que puedan acometer su ficha, por no decir ninguno.
El PSG ya ha dejado claro que el buque insignia del proyecto es Mbappé y no Neymar. Si en 2017 el astro brasileño aterrizaba en París como uno de los mejores jugadores del mundo, las tornas han cambiado tras la explosión definitiva del talento de Bondy. La importancia de Ney en el equipo ha ido decayendo continuamente y su presidente, Al-Khelaïfi, ya no se atreve a admitir públicamente que es intocable. Falta saber si hay algún equipo en Europa dispuesto a asumir su desorbitado salario y a correr el riesgo de fichar a un jugador que ya ha alcanzado la treintena de edad y que no ha tenido regularidad en su último año.