Xavi Hernández no deja de subrayar que su gestión en el vestuario se basa en la meritocracia y no en los nombres. Y bajo este argumento inamovible, el técnico del Barcelona tiene previsto hacer algunos cambios respecto al once que alineó en San Sebastián. Para empezar, ante el Valladolid recuperará el dibujo habitual, el 4-3-3, por lo que volverá a contar con una defensa de cuatro hombres, con dos laterales. Aquí es donde entran en escena sendos nombres propios: Sergi Roberto y Alejandro Balde.

Sergi Roberto completó un partido espectacular en la banda derecha ante el Manchester City de Guardiola, por lo que Xavi tiene previsto darle continuidad este domingo. De esta forma, matará dos pájaros de un tiro: aparte de contar con un especialista como carrilero, podrá reubicar a su posición natural a Ronald Araújo, que demostró tener serias dificultades en los dos primeros partidos de LaLiga como lateral derecho, sobre todo a la hora de manejarse con el balón y en la toma de decisiones.

También está por ver cómo acaba la confección de la plantilla y si finalmente se apuesta por un nuevo refuerzo en la banda derecha, sobre todo teniendo en cuenta que el club ha puesto en el escaparate a Sergiño Dest. Tras el fichaje frustrado de César Azpilicueta, ahora todas las miradas están puestas en el lateral argentino del Villarreal, Juan Foyth.

Por su parte, Alejandro Balde se mantendrá en la banda izquierda. Su gran rendimiento ante la Real Sociedad, siendo protagonista indiscutible en el primer gol de Lewandowski, le han consolidado en el carril. El canterano está en un momento espectacular y Xavi quiere aprovechar su velocidad para seguir sorprendiendo al rival.

Evidentemente, el gran damnificado con la apuesta de Balde es Jordi Alba, que ha empezado la temporada a un nivel muy inferior de lo esperado. Su situación podría agravarse aún más si finalmente se confirma el aterrizaje de Marcos Alonso o Javi Galán para reforzar la banda izquierda. Con la llegada de un nuevo fichaje y la presencia de Balde, que cuenta con la confianza de los técnicos, el papel de Alba esta temporada podría verse relegado a una mera comparsa, perjudicándole sobremanera sus ansias de estar en el Mundial de Qatar.